Salir del clóset: ¿cuándo, cómo, con quiénes?
Muchas personas LGBT se preguntan si para ser felices tienen que salir del clóset. Revelar a familiares y amigos la propia orientación sexual o identidad de género puede ser importante para algun@s, pero ¿es realmente necesario o conveniente en todos los casos? ¿Es la salida del clóset la única manera de vivir una vida satisfactoria como gay, lesbiana, bisexual o trans?
La salida del clóset es una decisión personal que se toma tras un balance de los riesgos y beneficios que implicaría, pero que no debe ser impuesta por otros o asumida como la única vía hacia una vida satisfactoria.
“¿Cuándo debo salir del clóset?”
El 11 de octubre de cada año se celebra el Día Internacional para salir del clóset y diversas organizaciones, tales como la Human Rights Campaign, desarrollan campañas que pretenden aportar recursos para quienes están considerando salir del clóset o para quienes están en proceso de asumir su orientación sexual o identidad de género.
Sin embargo, no existe un momento específico en la vida en el que todas las personas sexualmente diversas deban salir del clóset, pues ésta es una decisión personal que cada quien toma según sus necesidades y sus posibilidades en un contexto familiar y social particular.
Hay quienes salen del clóset muy rápidamente luego de asumir su diversidad sexual o de género, mientras que otros lo hacen mucho después, o sólo con ciertas personas. También hay quienes deciden nunca hacerlo por los riesgos personales que implicaría. En otros casos, los familiares o amigos confrontan a la persona LGBT y la sacan del clóset.
Finalmente, algun@s nunca han estado en el clóset y por tanto ni siquiera se plantean esta pregunta, bien sea porque han actuado siempre con naturalidad según lo que sienten o porque consideran que la orientación sexual o el género no son aspectos fundamentales de su identidad.
No existe una receta universal sobre la salida del clóset. Cada quien puede tomar las decisiones que considere más convenientes al respecto para promover su bienestar y garantizar su autoprotección.
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“Cuando salga del clóset voy a ser feliz!”
Algunas personas LGBT visualizan el momento de la salida del clóset como una liberación de todas las tensionesque viven al tener que ocultar aspectos tan importantes de sus vidas. En algunas circunstancias, el proceso de integrar la vivencia privada de la propia sexualidad o del género con la imagen que otros tienen puede ser realmente liberador.
Por ejemplo, hay quienes al salir del clóset sienten que pueden ser más coherentes con sus propios valores, al no tener que ocultar una parte importante de sus vidas a sus seres queridos ni tener que mentir ante las preguntas sobre su vida afectiva.
Sin embargo, el bienestar personal no se reduce a salir del clóset, pues existen muchas otras dimensiones de la vida que influyen en la sensación de felicidad. Por ejemplo, algunas personas LGBT deciden no salir del clóset en el trabajo o con su familia de origen y no por ello viven vidas insatisfactorias.
Salir o no del clóset no define totalmente la felicidad de un ser humano y cada quien deberá hacer su propio balance de riesgos y beneficios para decidir con quiénes y de qué manera quiere compartir su orientación sexual o expresar su género.
“¿Es diferente la salida del clóset si soy trans?”
Para muchas personas trans, la salida del clóset tiene matices diferentes a los que tendría para un hombre gay, una mujer lesbiana o una persona bisexual.
Por ejemplo una persona que está llevando a cabo un proceso de tránsito de género que implique intervenciones físicas presentará cambios visibles que pueden hacer difícil no salir del clóset con las personas con quienes se relaciona cotidianamente. Además, cuando el tránsito de género implica un cambio en la identidad civil de la persona, aspectos como el nombre se modifican y necesariamente habrá una salida del clóset al asumir la identidad deseada públicamente.
Sin embargo, las personas trans también pueden definir con quiénes se quiere compartir el proceso de tránsito en el género, quiénes simplemente se enterarán eventualmente o de quiénes es necesario distanciarse para avanzar en la propia construcción identitaria.
La sexo-afectividad no es un fenómeno únicamente biológico, sino que además se trata de un fenómeno social y psicológico, en el que cada persona puede decidir.
“¿Qué debo tener en cuenta si estoy pensando salir del clóset?”
Antes de salir del clóset, conviene reflexionar sobre las siguientes preguntas:
- ¿Qué tan tranquil@ me siento yo mism@ frente a mi propia orientación sexual o identidad de género?
- ¿Con quiénes me gustaría salir del clóset y a quiénes no me interesa incluir?
- ¿Qué espero lograr al salir del clóset?
- ¿Cómo podrían reaccionar mis familiares, amigos o compañeros de trabajo?
- ¿Qué beneficios y qué riesgos me traería esta decisión?
- ¿En quiénes podría encontrar apoyo durante la salida del clóset?
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