¡Me enamoré de una persona poliamorosa!
¿Conociste a alguien que te gusta, y de repente te dijo: “soy una persona poliamorosa”? ¿Te sientes insegurx?, ¿piensas que es una relación imposible o que te va a traicionar? Tómalo con calma. No hay razón para dar un paso atrás sin antes saber qué es el poliamor, la monogamia y cómo se acuerda una relación poliamorosa.
“¡No entiendo nada de poliamor!”
El poliamor es solo otra forma de relacionarnos de manera afectiva con los demás. Se trata de una manera novedosa y diferente a la monogamia. En la monogamia, el acuerdo básico es la exclusividad afectiva y sexual. Por el contrario, en el poliamor, se asume que se puede amar a dos personas a la vez (¡o a más!).
Tal vez te estés preguntando: “¿Es igual a una relación abierta?”
No, en el poliamor no se trata solo de acordar poder tener sexo con otras personas. Además, se trata de la posibilidad de amar a más de una persona. Tampoco significa traición o infidelidad, pues se establecen acuerdos claros y abiertos entre todxs lxs que participan. A su vez, una relación poliamorosa tampoco puede ser una medida drástica para salvar una relación.
Como puedes ver, las personas poliamorosas simplemente no se sienten a gusto con la monogamia. Son mucho más felices en una relación poli.
“Soy monógamx, ¿puedo amar a alguien poliamoroso? ¿Voy a morir de celos?”
En primer lugar, los celos son un sentimiento muy usual en cualquier tipo de relación afectiva (tanto en la monogamia como en el poliamor). No suelen ser un motivo de preocupación si los sabes manejar.
Por tanto, si estás pensando en iniciar una relación poliamorosa, es importante que conozcas a profundidad cómo reaccionas a los celos. Tus celos pueden ser una señal de inseguridad o temor a no satisfacer a tu pareja, a que encuentre a alguien mejor, o a que termine contigo.
En conclusión, en el poliamor es importante que la seguridad surja del bienestar de todas las personas que participan en la relación, y no del control sobre la vida de la otra persona.
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“¿Cómo le digo lo que siento? ¿Pensará que no estoy preparadx?”
Si estás pensando en iniciar una relación con una persona poliamorosa, hay dos aspectos que nunca deben faltar: la comunicación y los acuerdos. Desde nuestra perspectiva, el éxito o fracaso de una relación está en la sinceridad y claridad con que los establezcan.
Puede que al inicio pienses: “Mi pareja es poliamorosa, así que prefiere pasar el tiempo con otras personas. No me ama de verdad”. ¡Respira! Todas las personas tienen dudas e inseguridades.
Por tanto, poder hablar y comunicar lo que piensas y sientes a tu pareja les dará herramientas para evaluar la situación. Así, podrán buscar estrategias para que ambxs se sientan a gusto.
“¿Entonces en el poliamor todo se vale?”
No, cada relación poliamorosa es única así como cada relación fundada en la monogamia lo es. Es así como cada persona tiene que evaluar con qué se siente comodx para establecer acuerdos y no dañar a su pareja. Además, los acuerdos son fundamentales. Estos deben ser claros para quienes participan en la constelación poliamorosa, pues son las bases de la relación.
Aunque los acuerdos en el poliamor pueden ser muy variables, algunos de ellos son:
- Establecer tiempos para que cada cual se sienta amadx.
- Acordar los cuidados en las relaciones sexuales fuera (y dentro) de la pareja.
- Ser sincerx respecto a las personas con las que crean lazos amorosos.
“¿Tengo que ser poliamorosx? ¿Me voy a sentir presionadx?”
Lo primero que debes saber es que es perfectamente posible ser monógamx y tener una relación con una persona poliamorosa. Todas las personas de la relación pueden encontrar su lugar. Por tanto, es importante que te des cuenta cómo quieres vivir tus relaciones, y sentir plenitud con tu elección.
Sé sincero contigo mismx y con los demás. Puedes crear lazos desde la monogamia con una persona poliamorosa si exploras qué necesitas para sentirte bien.
En el poliamor, la seguridad promueve el bienestar de todas las personas que participan en la relación, y no parte del control del otrx.
“Si la relación termina es su culpa. Ya he aguantado suficiente”
Si sientes que estás haciendo un sacrificio al estar con una persona poliamorosa, quizá debas replantear tu relación. La base de una relación sólida es aceptar a la otra persona tal cual es. Por tanto, una vez tomada la decisión es responsabilidad de ambxs nutrirla y resolver los conflictos que se presenten.
Además, si sientes vergüenza de que tu familia se entere que sales con una persona poliamorosa, crees que no estás haciendo lo correcto, o te sientes incómodx, háblalo con personas de confianza y toma decisiones conscientes. Así evitarás hacerte daño a ti mismx y causar daño en tu pareja.
También está bien si decides que estar con una persona poliamorosa no es para ti. Si prefieres estar con una persona en un acuerdo desde la monogamia es también legítimo.
¿Aún tienes dudas sobre cómo navegar el poliamor?
Aquí te dejamos algunas claves que pueden ayudarte:
- Escucha sin prejuicios lo que la otra persona siente, piensa y ha vivido en sus relaciones amorosas.
- Evalúa tus miedos e inseguridades y contempla el impacto que pueden tener la relación.
- Habla con claridad sobre tus sentimientos, lo que te molesta y lo que te agrada.
- Busca redes de apoyo, personas de confianza o asesoría de profesionales, e infórmate sobre qué es el poliamor.
- Ve con cautela: empezar una nueva dinámica afectiva implica muchos cambios. Algunos de estos pueden ser difíciles y es recomendable enfrentarlos a tu ritmo.
- Cuestiona tus prejuicios sobre el poliamor y las relaciones de pareja: hay más de una manera de vivir las relaciones afectivas. Encuentra la tuya en cada momento de tu vida.
- Evita presionar a la otra persona para que cambie: cada persona debe sentirse cómoda con la forma en que vive su relación. Aceptar un acuerdo por presión no ayudará a fortalecer el vínculo.
¿Aún tienes dudas, ganas de seguir explorando o de gritarle al mundo que le amas? Te invitamos a que participes con tus aportes en la sección de comentarios debajo del formulario de contacto. ¡Queremos oírte!
