Emprender como persona sexualmente diversa es un gran reto. Para muchxs significa tomar un camino hacia la libertad laboral y financiera.
Por años, hemos discutido sobre las devastadoras cifras de exclusión, discriminación y maltrato a las personas LGBTIQ+ en el mundo laboral en Latinoamérica.
Según el estudio Diversidad sexual en el ámbito del trabajo, las personas sexualmente diversas en Latinoamérica deben hacer un doble esfuerzo para demostrar su eficiencia.
Esto no sólo es extenuante y frustrante, sino que denota una práctica discriminatoria menos ruidosa, pero no por ello, menos lesiva.
Aunque hay numerosos casos de incorporación exitosa en el mundo laboral, pareciera que abrirse paso en el mundo corporativo latino es una empinada cuesta con la cima cada vez más lejana.
A aquellxs afortunadxs que logran pasar los gruesos filtros de la discriminación por su diversidad sexual o de género, les espera un mundo laboral que, en algunos casos, es satisfactorio y bien remunerado.
Sin embargo, existe un gran número de personas LGBTIQ+ que se encuentran sin empleo o con la sensación de estar atrapadxs en un empleo poco retador, sin oportunidades de crecimiento y en condiciones laborales que dejan mucho que desear.
Por tanto, muchxs se hacen la pregunta: ¿Qué implica emprender como persona sexualmente diversa?
Emprender como personas sexualmente diversas: una base libertaria
Desde la infancia, nos han inculcado que un empleo es la garantía de seguridad, crecimiento y desarrollo profesional.
Es cierto, un empleo nos garantiza un sueldo, estabilidad económica y un ambiente para desarrollarnos a plenitud. No obstante, formar parte de una empresa, muchas veces limita nuestra capacidad, nuestra creatividad y nos obliga a seguir una serie de normas establecidas por la empresa.
Muchas veces nuestras ideas chocan directamente con los objetivos de la empresa o con los lineamientos de unx jefx cerradx. A veces simplemente no sentimos que nuestras propuestas sean tomadas en consideración.
Más aún, las limitaciones creativas no son las únicas fronteras que se nos imponen en el mundo empresarial. Los horarios, las reuniones obligatorias, los uniformes y los códigos internos son, muchas veces, más parecidos a un colegio que a un empleo.
Miles de sueños se desinflan en soñadorxs que despiertan en un empleo que no les hace felices y que no siempre compensa económicamente.
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¿Qué implica emprender como persona sexualmente diversa?
Emprender no es el premio de consolación. Tampoco es una vía libre al éxito.
Emprender es comenzar un camino, a ratos espinoso y difícil, pero que cosecha cada triunfo como fruto de nuestras propias habilidades y de nuestro esfuerzo.
Emprender como persona sexualmente diversa es la manera más disruptiva de decirle al mundo: “¡Aquí estoy! Mis diferencias suman y mi diversidad aumenta mi capacidad laboral.”
La bandera más libertaria que podemos enarbolar es animarnos a emprender como personas sexualmente diversas. Es la manera de decir a través de nuestros triunfos, que nada ni nadie puede detenernos.
No puedo emprender como persona sexualmente diversa, porque…
No tengo dinero
Esta es la excusa #1. La falta de capital propio es la razón principal que impide que muchas ideas traspasen la frontera del papel y se conviertan en realidad.
El dinero es indispensable para que un proyecto se concrete. No solo se contempla la inversión necesaria en el negocio, sino la sustentación de la vida de lx emprendedorx hasta que el negocio coseche frutos.
Sin embargo, te has preguntado, ¿cuántos negocios han comenzado sin un centavo, con dueñxs en la quiebra o con todo en contra?
No sirvo como empresarix
Ser empresarix es una cosa muy distinta a ser emprendedor. Si te imaginas a Bill Gates o a Rockefeller, quizá no todo el mundo quiera seguir estos pasos.
Sin embargo, dando un paseo por tu barrio o indagando en tus redes sociales, encontrarás a decenas de emprendedorxs que han luchado por sus sueños, sin conocimientos especializados iniciales sobre finanzas o leyes.
ADIL es una consultora mexicana que brinda asesoría sobre la inclusión laboral sexodiversa. Según ADIL, solo ¼ de las personas LGBTIQ+ se ha formado en el área de negocios y empresas.
Así que si no eres uno de ellxs, seguro podrás asesorarte profesionalmente y encontrar el apoyo técnico o financiero que necesitas para hacer crecer tu emprendimiento.
No se qué negocio emprender
Esta puede ser la excusa más fácil de rebatir.
Hay millones de negocios. Hay negocios en cada punto donde llegue nuestra vista. Eso que solo tú haces, eso que te encanta y que haces muy bien, tiene un público al que le interesa.
La maravilla oculta dentro al emprender como persona sexualmente diversa es que te da la oportunidad de hacer eso que te gusta a diario y además ayudar a otras personas a resolver una necesidad o a vivir mejor. Es más, entre más te guste lo que haces, mejor lo harás y más dinero recibirás.
Desde animar fiestas hasta hacer cirugías coronarias, todo aquello que disfrutemos y en lo que nos sintamos útiles para los demás, nos hará esforzarnos más y ser mejores.
Piensa y encontrarás cómo emprender siendo una persona sexualmente diversa en esa actividad que disfrutas. Luego, ponte en acción y actúa en consecuencia.
Me voy a volver a enfrentar a las mismas barreras
Si, claro que te vas a enfrentar a las mismas barreras. Emprender no es un escudo anti-discriminación, ni un salvoconducto a una vida feliz de inmediato.
Emprender como persona sexualmente diversa puede ser para algunxs un pasaporte a un mundo más libre. Cuando eres dueñx de tu negocio, puedes tomar decisiones que te lleven a un rumbo alejado de estigmas y sufrimientos.
Por ejemplo, la comunidad LGBTIQ+ ha crecido lo suficiente como para transformarse en una fuerza económicamente poderosa y con poder de compra capaz de sostenerse.
Según un artículo de La República, en junio del 2019, las personas LGBTIQ+ movilizaron 253.000 millones de dólares, tan sólo en América Latina.
Si ponemos imágenes a esas cifras, nos pintan un panorama ampliamente amigable para negocios manejados por personas sexualmente diversas.
Te invitamos a dejar de perder el tiempo y evitar la procrastinación. Comienza tu nueva vida al dibujar ese futuro que te pertenece y que está ahí esperándote.
Emprender como persona sexualmente diversa es una aventura fascinante. Llena de amargos tragos y sonadas derrotas, pero con un dulce sabor a aprendizaje, a triunfo y a orgullo.
“Tu tiempo es limitado, así que no lo malgastes viviendo la vida de otrx… Vive tu propia vida. Todo lo demás es secundario.”
Steve Jobs
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